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miércoles, 3 de diciembre de 2014

Pequeños ACV pueden conducir a trastornos de estrés postraumático

American Hearth Association: Alrededor del 30 por ciento de los pacientes con un ataque isquémico transitorio o  "mini-accidente cerebrovascular" tenía síntomas de trastorno de estrés postraumático (TEPT) en un nuevo estudio. 

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Aspectos principales del estudio 
  • Alrededor del 30 por ciento de los pacientes con un ataque isquémico transitorio o  "mini-accidente cerebrovascular" tenía síntomas de trastorno de estrés postraumático (TEPT) en un nuevo estudio. 
  • Las personas con TEPT tenían más depresión, la ansiedad y la reducción de la calidad mental y física de la vida. 
  • Los pacientes que sobreestiman su riesgo de accidente cerebrovascular y que no hacen frente a su bien mini-accidente cerebrovascular tienen un mayor riesgo de desarrollar trastorno de estrés postraumático. 


DALLAS, 02 de octubre 2014 - Un "mini-accidente cerebrovascular" puede aumentar el riesgo de desarrollar el trastorno de estrés postraumático (TEPT), según un nuevo estudio publicado en la revista Stroke  de la American Heart Association. 

El ataque isquémico transitorio (TIA), como accidente cerebrovascular, es causado por un restringido suministro de sangre al cerebro. Un TIA es temporal y a menudo dura menos de cinco minutos, sin causar daño cerebral permanente. 

"Encontramos que uno de cada tres pacientes con AIT desarrollan TEPT", dijo Kathrin Utz, Ph.D., autor principal del estudio e investigador post-doctoral en el Departamento de Neurología de la Universidad de Erlangen-Nuremberg en Alemania. 

"Trastorno de estrés postraumático, que es quizás más conocido como un problema encontrado en los supervivientes de las zonas de guerra y los desastres naturales, puede desarrollarse cuando una persona experimenta un evento aterrador que plantea una seria amenaza." 

El estudio es el primero en analizar si un TIA y el conocimiento de un mayor riesgo de accidente cerebrovascular puede llevar a los pacientes a desarrollar problemas psiquiátricos. 

Después de examinar los datos de 108 pacientes con AIT sin historia previa de ictus y de la revisión de las respuestas de los participantes a una serie de cuestionarios que evaluaron su estado mental, alemán e investigadores británicos encontraron: 

  • Alrededor del 30 por ciento de los pacientes con AIT reveló síntomas de trastorno de estrés postraumático. 
  • Alrededor del 14 por ciento de todos los pacientes con AIT mostró una reducción significativa de la calidad mental de la vida y el 6,5 por ciento había reducido la calidad de vida física. 
  • Las personas con TEPT mostraron mayores signos de depresión, ansiedad y calidad de vida reducida. 

El miedo de los pacientes de sufrir un derrame cerebral y las conductas de afrontamiento pobres después de un AIT puede ser parte de la culpa para ellos desarrollar TEPT. 

"Mientras que el miedo se justifica en parte, muchos pacientes pueden estar sobreestimando el riesgo y aumentar sus probabilidades de desarrollar trastorno de estrés postraumático", dijo Utz. 

"Cuando se experimenta en conjunto, los síntomas de TIA y la depresión suponen una carga psicológica importante en el paciente afectado; por lo tanto, no es ninguna sorpresa que también hemos encontrado que los pacientes con AIT con TEPT tienen un sentido sensiblemente inferior de calidad de vida ". 

Incluso una breve enfermedad neurológica, que en sí mismo no conduce a una discapacidad crónica, puede ser tan traumático como un acontecimiento como un accidente de tráfico o un desastre natural, dijeron los investigadores. La forma en que un paciente responde normalmente a situaciones de estrés puede ayudar a determinar el riesgo de desarrollar trastorno de estrés postraumático después de un TIA. 

"Los pacientes que utilizan ciertos tipos de estrategias de afrontamiento, como negar el problema, culpando a sí mismos por cualquier dificultad o recurrir a las drogas para la comodidad, se enfrentan a un mayor riesgo de desarrollar trastorno de estrés postraumático después de un AIT," dijo Utz. 

  "Todavía no está del todo claro por qué algunas personas desarrollan trastorno de estrés postraumático después de un TIA, pero otros no lo hacen. Sin embargo, lo que sí sabemos en este momento es que los pacientes y los pacientes más jóvenes, que en general tienen dificultades para hacer frente al estrés son más propensas a desarrollar problemas psicológicos después de un AIT ". 

Utz sugiere proporcionar a los pacientes un mejor asesoramiento de riesgos y estrategias de adaptación más positivas de hacer frente a TIA. 

Las declaraciones y conclusiones de los autores del estudio publicado en la Asociación Americana del Corazón revistas científicas son únicamente de los autores del estudio y no reflejan necesariamente la política o la posición de la asociación. La asociación no hace ninguna representación o garantía en cuanto a su exactitud o fiabilidad. La asociación recibe financiación principalmente de los individuos; fundaciones y corporaciones (incluyendo productos farmacéuticos, fabricantes de dispositivos y otras empresas) también hacer donaciones y financiar programas y eventos de asociaciones específicas. La asociación tiene políticas estrictas para evitar estas relaciones de influir en el contenido de la ciencia. Los ingresos de las empresas farmacéuticas y de dispositivos están disponibles en www.heart.org/corporatefunding.

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